Un plato de ducha acrílico está fabricado en metacrilato, junto con una mezcla de resina de poliéster y fibras, que le dan al plato resistencia y su característico acabado color Blanco brillo.
Se trata de platos de ducha muy sencillos, de precio económico, el diseño del plato puede ser cuadrado, rectangular y semicircular, diferentes opciones para tu ducha.
El acabado del plato, si es acrílico siempre es en color Blanco y en Brillo, no puede ser mate ni en colores, tampoco puede ser personalizable con texturas o en colores.
Están disponibles en todo tipo de medidas y tamaños, no se pueden cortar, por lo que a la hora de elegirlos y comprarlos debemos tener muy claras las medidas del hueco para la ducha.
Plato de ducha acrílico, ventajas
Son platos de ducha sencillos, quedando bien en cualquier tipo de ducha, sea cual sea el estilo del baño.
Tienen resistencia a golpes o impactos, sin embargo si se rompe por una esquina o se hace una marca no se puede reparar, por lo que se debe tener cuidado.
Son muy fáciles de limpiar y mantener, se pueden limpiar con todo tipo de productos de limpieza y raramente se hacen manchas.
La durabilidad es larga, son el plato de ducha de toda la vida, el que siempre se usaba en los baños, tanto en reformas como en obra nueva.
Uno de los inconvenientes es que no son tan antideslizantes como los platos de ducha de resina, por lo que es recomendable poner una alfombra, haciendo la ducha mucho más segura.
Su precio es mucho más económico que en platos de ducha de otros materiales como Resina o Solid Surface, llegando a costar incluso la mitad de precio, siendo la misma medida.
¿Cuándo elegirlos?
Elegiremos un plato de ducha acrílico cuando por nuestras necesidades creamos que es el plato que mejor se adapta al estilo y funcionalidad de nuestra ducha.
Para reformas o renovaciones de baño con bajo presupuesto, suponen la opción perfecta, ya que son mucho más económicos.
Cuando queremos un plato de ducha de aspecto sencillo, que sea blanco y que el acabado sea brillante.
Si somos algo maniáticos de la limpieza o nos gusta limpiar el plato con lejía es la mejor opción, en un plato de ducha de resina no podemos utilizarla.
Para huecos en los que tenemos muy claras las medidas que tiene que tener el plato, los platos de ducha acrílicos no pueden cortarse.
Son fáciles de instalar, por lo que tendremos nuestro plato cambiado en un sólo día o como mucho en dos días, dependiendo del instalador.
Resbalan algo más que los platos de ducha de resina, sin embargo, podemos colocar una alfombra antideslizante en el plato, son económicas y nos dará mayor seguridad.
¿Necesitas un plato de ducha acrílico?, contacta con nosotros y te ayudaremos a elegirlo y conseguirlo al mejor precio.