
Un plato de ducha piedra es un plato con acabado o textura que imita la piedra natural, consiguiendo que el diseño del plato tenga un estilo mucho más original, elegante, con estilo rústico e ideal para todo tipos de ducha.
A diferencia de la textura o el acabado de los platos de ducha pizarra, la piedra es un tipo de acabado como si fuera piedra natural, mucho más natural, con un aspecto que simula perfectamente el acabado piedra.
Son platos de ducha fabricados en resina, con gran calidad y resistencia a rayado, impactos y cambios de temperatura, agentes químicos y productos de limpieza, teniendo incluso dureza escala Barcol de 45.
Tienen una nula absorción de agua, además de ser antibacterianos e higiénicos, por lo que tienen una fácil limpieza y mantenimiento, siendo muy rápidos de mantener y limpiar, siempre desinfectados.
El color del plato, al ser fabricados en resina puede elegirse en todo tipo de colores y acabado, con la textura piedra queda un plato de estilo y aspecto elegante y muy bonito, además de ser muy originales.
Son antideslizantes clase 3, siendo el grado más alto del mercado antideslizamiento, ideales para todo tipo de baños, también para personas mayores o con movilidad reducida, evitando resbalones en la ducha.
Razones para elegir un Plato de ducha piedra
Una de las principales razones para elegir un Plato de ducha piedra además de su acabado elegante, estilo y diseño es por ser antideslizante, además de ser clase 3, su textura piedra lo hace todavía más antideslizante.
Su diseño original lo convierte en un plato de ducha de estilo rústico y elegante, para todo tipo de baños, tanto rústicos, como modernos, adaptándose perfectamente al resto de la decoración y estilo del baño.
Otra de las razones para elegirlo es su fácil limpieza y mantenimiento, simplemente se debe aclarar la ducha con agua tras su uso y limpiar con jabón neutro, no hacen falta desinfectantes ni lejía para su limpieza.
Ventajas de los platos de ducha tipo piedra
Además de por su estilo, por ser antideslizantes y por su gran variedad de colores, los platos de ducha tipo piedra son perfectos para cualquier tipo de baño, sea cual sea su estilo o diseño, combinando perfectamente.
A la hora de combinarlos podemos elegirlos en todo tipo de colores, desde el clásico color blanco a colores como negro, azul, rosa e incluso rojo, ¿Con cuál te quedas?, todos ellos son súper elegantes y quedan genial.
Por su fácil limpieza, mantenimiento y por ser platos de ducha higiénicos, con superficie antibacteriana, el efecto del plato en textura tipo piedra no influye en la limpieza ni en la desinfección del plato.
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